En invierno, el clima es muy cambiante, la lluvia intensa, el frío y las bajas temperaturas pueden afectar a nuestro coche. Para evitar daños o accidentes es imprescindible comprobar que todo está en orden y conducir lo más seguro posible.
No importa si el trayecto es corto o largo, siempre hay que mantener todas las piezas a punto para que el viaje sea seguro y cómodo, hacer una revisión en profundidad y una puesta a punto cuando el coche ha estado mucho tiempo apagado o si tenemos planeado un viaje largo.
Antes de salir, y como primera precaución, debemos tener en cuenta la previsión meteorológica, necesitamos comprobar a qué clima nos vamos a enfrentar, sobre todo con las bajas temperaturas y las lluvias intensas que hacen las carreteras más peligrosas.
Si tenemos planeado un viaje largo a zonas de nieve o temperaturas extremas no hay que olvidar llevar siempre cadenas en buen estado, en Toyota Gamo Bahía conocemos la importancia del uso adecuado de las cadenas, ya que aunque parezca sencillo, éstas se deben colocar con mucho cuidado y aun llevándolas hay que conducir con extrema precaución.
¿Qué debo revisar primero?
Para empezar con la revisión y organizarnos, recomendamos crear una check list, para tenerlo todo en orden y no saltarnos nada.
Empezando, revisamos las direcciones, las luces y lo más importante, el estado de los frenos. Tanto las pastillas como los discos de freno son elementos que se deben revisar con frecuencia, el continuo uso provoca un desgaste que podemos pasar por alto, por eso, te recomendamos que acudas a nuestro taller oficial Toyota Gamo Bahía, para una revisión completa que te garantiza un viaje seguro.
Lo siguiente que deberíamos revisar serían los limpiaparabrisas y los neumáticos. Los limpiaparabrisas, los grandes olvidados, necesitan limpiarse y ser revisados con cierta frecuencia, pues pueden llevar a dificultades en la visión en carretera, en lluvia o nieve.
En cuanto a los neumáticos debemos tener en cuenta la profundidad del dibujo, que por ley debe tener 1.6 mm, la fijación, la adherencia y el control del vehículo dependen de ello. Tampoco hay que olvidar comprobar la presión de estos, sobre todo ante temperaturas extremas de frío o calor. Estas sencillas comprobaciones son muy importantes para una conducción más segura.
Cuando nos enfrentamos a temperaturas tan bajas como en invierno, es posible que la capacidad de la batería se vea reducida. Debemos tener cuidado mientras conducimos y fijarnos en su estado cuando arrancamos el coche, para salir de dudas, acude a nuestro taller para que nuestros profesionales te asesoren sobre estado.
Lo necesario para una conducción cómoda
Habiendo hecho todas las comprobaciones anteriores podemos asegurarnos de tener un viaje más tranquilo y seguro.
Pero hay un elemento olvidado en nuestro coche, uno que solo tenemos en cuenta cuando nos vemos prescindidos de él y es el aire acondicionado, un elemento básico que siempre damos por hecho que funcionará, pero que cuando falla no sabemos cómo proceder. Y no es agradable quedarse sin aire acondicionado en medio de la carretera, ya que el interior del coche necesita estar bien aclimatado para una conducción más cómoda.
Para que esto no pase es necesario un control previo al viaje, aparte de asegurarse de pasar las revisiones anuales y la recarga de gas necesaria cada año.
La suspensión del coche se encarga de evitar más movimiento del necesario en carretera cuando se pasa por alguna clase de bache o se conduce por terreno más inestable. Es muy importante si vamos por distintos tipos vías y hace que durante la conducción no provoque accidentes por perder el control del vehículo. Hay que tener en cuenta los amortiguadores, y revisarlos antes de salir. En carreta, no hay que escatimar en precauciones.
Precauciones en carretera
Cuando se sale a la carretera hay que tener siempre presente el parte meteorológico, para evitar sorpresas e ir preparados, tanto si en un viaje rutinario al trabajo como si se sale de vacaciones.
En climas cambiantes como nubarrones de lluvia, debemos ir con la mayor precaución y estar atentos a los demás conductores y a las señales. Guardar incluso más de la distancia recomendada y contar con cualquier inconveniente como atascos o carreteras cortadas.
En las curvas, ten en cuenta que cuanto menos gires mejor, evitando un ángulo de giro muy abierto, que puede provocar un derrape del tren delantero (lo que acabaría en accidente o en un desgaste excesivo del dibujo de los neumáticos).
Al acelerar recordemos hacerlo con delicadeza, a la hora de frenar, es mejor usar el propio motor del coche y si llega el caso en el que tengas que frenar de forma brusca, recuerda hacerlo con las ruedas rectas.
En las rotondas hay que extremar la precaución, sobre todo en invierno, debido al deslizamiento de las ruedas, para ello aconsejamos acelerar de manera suave, girando el volante con delicadeza y apoyándote en el cambio de marchas antes que en pedal de freno.
Como hemos mencionado antes, a la hora de salir a carretera el clima es un factor importante, la nieve puede caer de sorpresa y si nos pilla sin estar preparados, los riesgos son muy altos.
A la hora de nieve intensa, debes tener cuidado para aparcar el coche y hacerlo alejado de árboles y cornisas, pues son un riesgo elevado que pueden provocar daños.
También aconsejamos intentar hacerlo en un lugar llano, sin pendientes pronunciadas o inclinadas hacia ningún lado. Para no llevarnos ninguna sorpresa con los cristales durante frío extremo, te recomendamos cubrir la luna delantera con lo que tengas a mano, papel, cartón o una manta.
Si llega a acumularse hay que quitarla, tanto en los cristales y el techo, como en las ruedas, pues el peso puede causar daños en el exterior y en la estructura.
Lo mejor para una buena conducción es no escatimar gastos en seguridad, tener todo en cuenta a la hora de salir y saber qué medidas tomar en caso de que ocurra un accidente o falle algo en el vehículo. En Toyota Gamo Bahía queremos que nuestros conductores disfruten de una conducción segura y sin incidentes, para que puedas disfrutar de unas vacaciones sin problemas o preocupaciones de más.